Killin' me softly...

Fue feo. Muy. Me subo al colectivo y soy la única persona parada. Me paro al lado de una chica que iba plácidamente sentada, leyendo. El colectivo se empezó a llenar y yo cada vez más achurada, rogando que la chica se bajara pronto y me diera el asiento. A la media hora de viaje (cuando ya casi todos los pasajeros originales se habían bajado y cedido sus asientos) yo seguía parada ahí, apretujada y molesta. En ese momento la chica cierra su libro y lo mete en la cartera. Yo, disimuladamente, me empecé a ilusionar. Dije: 'Esta ya se baja'. Respuesta equivocada. Pasaron 10' y ni se inmutó, así que una de tres:
-o se había mareado por leer y por eso lo guardó,
-o terminó un capítulo y no quiso empezar otro porque no llegaría a terminarlo antes de bajarse (no se rían, yo lo hago)
-o de puro malvada me hizo 'creer' que bajaría pronto y me engatusó...
Cuando acepté la triste realidad de que no se iba a bajar nada, la veo abrir la cartera y sacar las llaves. Me dije: 'Ahora sí, ya se baja'. Minga! Falsa alarma, de nuevo. Ví pasar las paradas y ella nada, mirando por la ventana... Sin inmutarse...
Acepté mi destino: hoy NO iba a sentarme... odiaba a la maldita pasajera que con tanta alevosía, me hacía creer una y otra vez que se bajaba... y no... Cual sortija de calesita... Seguro que hasta lo planificó. Habráse visto. Salirse con la suya de esa manera. Odiosa. Arpía. La odié. Y no, no me senté hasta que me bajé. Ufa!